La mala gestión pública en el programa social Qaliwarma

Retrato de autor
Autor: Delia Elizabeth Sanchez Inga Carrera

Hace algunas semanas, una noticia alarmó al Perú: varios estudiantes y profesores de diversos colegios públicos denunciaron que los alimentos distribuidos por el programa Qali Warma se encontraban en condiciones deplorables, lo que puso en evidencia una mala gestión del presupuesto. Estos hechos fueron denunciados, y se anunció que se tomarían medidas al respecto.

Unas semanas después, un conocido medio de comunicación reveló que dentro de las organizaciones vinculadas al programa existía una mafia que adulteraba los productos para obtener beneficios particulares. El ministro de Educación señaló que es de suma importancia evaluar este caso, y que las personas implicadas —seis en total— ya están recibiendo sanciones administrativas para pasar a la sanción penal, debido al perjuicio causado a la salud y bienestar de los estudiantes.

Por otro lado, se reveló algo aún más alarmante: se habrían pagado coimas a funcionarios de la DIGESA para alterar el proceso administrativo y encubrir la malversación de fondos. La empresa implicada sería Frigoinca, que, en complicidad con organismos estatales, disfrazaba los valores monetarios reales. Esta empresa ha obtenido 29 contratos por un total de S/88 millones con el Estado, a pesar de que la calidad de sus productos ha sido constantemente cuestionada. La mayoría de las instituciones públicas del país rechazan completamente este tipo de actividades, y hacen un llamado urgente a las autoridades pertinentes para que tomen cartas en el asunto. Si bien el país atraviesa una crisis sistémica en los niveles económico, político y social, las poblaciones más vulnerables —en este caso, los niños— son las más afectadas por la corrupción. Diferentes ONGs y organizaciones pro salud advierten que, si esta situación continúa, el derecho a un sistema de salud y alimentario adecuado se verá gravemente afectado.

Para finalizar, es evidente que nuestro sistema está perjudicando a personas que no debería. Los niños deben acceder a una educación de calidad, lo que incluye recibir apoyo alimentario adecuado. Debido a estas circunstancias, muchos niños resultaron intoxicados por la mala composición de los alimentos. El Estado, por su parte, ha brindado soluciones ineficientes que, hasta el momento, no han resuelto el problema de fondo. Esperamos que en los próximos días se tomen medidas más efectivas y se realice una reestructuración en la distribución de alimentos del programa Qali Warma.

Dina Boluarte y la crisis política peruana

Fuentes:

  • Palomino, E. (2024). Caso Qali Warma: Midis separa a trabajadores involucrados en presuntos actos de corrupción en programa de alimentación. La Republica. Caso Qali Warma (Link de la fuente)
  • Calderón, C. (2024). Red criminal en Qali Warma: chats revelan que seis trabajadores habrían recibido coimas de proveedor para encubrir alimentos de mala calidad. Infobae. Red criminal en Qali Warma (Link de la fuente)